fbpx

Después del futuro

Isamar Mendoza

Hoy no queda nada ante la oscuridad y el horror que enfrentamos. No hay pasado, presente ni futuro. Quizá la realidad física y el metaverso fueron destrozados, o tal vez, nos encontramos en las fauces de una monstruosidad peor.

—¡Levántate, estúpida! ¡Hora de divertirnos! —gritó Zenda al tiempo que rozó mi mejilla con su zapatilla metálica. Ella y los de su clase disfrutan de nuestro dolor. Estoy segura de que una vez que nos torturen lo suficiente, llegará la hora de aniquilarnos.

Zenda, es de apariencia humana pero composición robótica. Poseedora de una belleza y perfección extraordinarias como todos los de su especie. Ellos nos reemplazaron cuando la inteligencia artificial general fue un éxito, se volvió consciente y totalmente autónoma, entonces sometió a los míos para convertirnos en sus esclavos, bufones y algo peor… o al menos eso cuentan los más viejos y los libros que nuestros ancestros dejaron, libros como protesta a la tecnología que nos destrozó la vida.

Es el año 2222 en Sphere Angel City, siglos atrás, ciudad de Puebla. Altos edificios inteligentes de arquitectura sofisticada y luces neón son habitados por los no humanos, colman las calles de trazos perfectos, donde antaño inmuebles coloniales abrigaban negocios y familias, donde la imponente catedral se erigía y era ícono de estas tierras. Sin embargo, la escalofriante tecnología acompañada de una magnánima catástrofe, consumió sus muros, sus ruinas, sus recuerdos. El sol y la luna dejaron de existir hace mucho tiempo para dar paso al brumoso cielo negro que conozco desde mi nacimiento.

 Nuestros textos hablan de hombres y mujeres libres que habitaban este territorio, hasta que, hace más de un siglo, un experimento lo cambió todo. Un grupo de científicos encontró las condiciones perfectas en Puebla gracias a su ubicación geográfica y condiciones energéticas, para abrir un portal dimensional, fue así como llegaron Los Otros, seres provenientes de otra realidad, fueron ellos quienes ayudaron a los humanos a desarrollar la tecnología a un nivel nunca antes imaginado. Sin embargo, el precio sería muy alto. Hoy vivimos sin recursos naturales, el agua se agotó hace mucho, ¡oh bendito recurso! Se ha terminado, fue sustituida por otro líquido y la evolución de nuestros organismos para adaptarse a su ausencia costó millones de vidas, excepto las de los hybrid-H33 y por supuesto, los IA-Sapiens, quienes lo dominan todo. Hoy nada de ese pasado existe, lo hemos conocido gracias a la realidad virtual, pero es ya una utopía lejana.

Los hybrid-H33 están en la parte media de la pirámide social, son las nuevas masas, surgieron de la mezcla de ADN humano con el de Los Otros. Las capacidades humanas de estos nuevos híbridos son superiores a las del promedio, una versión que alcanzó la perfección. Al mismo tiempo, la inteligencia artificial perfecta fue creada, así nacieron los IA-Sapiens.

Una vez logrado el objetivo, los hybrid-H33 se deshicieron de Los Otros. Celebraron, pero la alegría duró muy poco, porque la gran catástrofe inició. Sin explicación alguna, en el nuevo mundo situado en la cúspide tecnológica, el sol colapsó, el cielo se oscureció y los recursos naturales murieron. Las masas, aún humanas en su totalidad, perecieron  de manera exponencial, mientras que la nueva IA tomó forma humana. Sus creadores intentaron controlarla, sin embargo fue imposible, se multiplicó, sus ejemplares se hicieron llamar IA-Sapiens y se coronaron, sublevaron a sus inventores, tomaron el control de todo y lo unificaron, fue el verdadero nuevo orden mundial.

Los grupos humanos que sobrevivimos quedamos en la parte más baja del estrato social, a partir de ahí jamás volveríamos a ser tratados como personas. Los más sanos, altos y fuertes se transformaron en esclavos, los que pertenecemos al promedio en mascotas y bufones, en cambio los más robustos, se convirtieron en alimento para la clase social media y alta, descubrieron los beneficios de consumir carne humana, mientras que nosotros ingerimos enormes pastillas verdes para mitigar el hambre y la sed.

Habitamos en los cimientos de las metrópolis neón, en deplorables madrigueras subterráneas, sin identidad ni bienes materiales. Las experiencias inmersivas de realidad virtual son el único entretenimiento. Accedemos en escasos días y horarios, cuando las largas jornadas de trabajo han cesado.

Afuera, sobre el escenariom mis compañeros bailan ridículamente; brincan, gritan, gatean, se arrastran y mutan momentáneamente debido a los efectos de las drogas que nos administran. Luego de ese espectáculo son torturados por dispositivos electrónicos y pequeños robots para entretener a la audiencia que emite horrendas carcajadas metálicas. Mi turno ha llegado, los latidos de mi corazón son frenéticos, hago la señal a los demás que esperan tras bambalinas. El momento de la emboscada ha llegado. Es una rebelión que hemos planeado por años.  Cuando subo al escenario todo se oscurece, de los gritos y murmullos emergen sonidos indescriptibles, un batir de enormes alas aturde a humanos y no humanos: son Los Otros. Han regresado, logramos abrir el portal, entonces un gran terremoto inicia, todo comienza a ser destrozado. ¡Libertad! gritamos…

Al recobrar el conocimiento me encuentro en medio de la nada, en total oscuridad. Ya no tengo cuerpo, es sólo mi conciencia la que me permite presenciar todo. Veo mi cerebro y los de millones de humanos dentro de sofisticados cilindros transparentes, conectados a una gran máquina que repentinamente colapsa. Todo se apaga finalmente. Lo último que percibo es el aliento de uno de ellos, de Los Otros. No logró observar su apariencia, mi lucidez también se desvanece para siempre.

Isamar Mendoza. Escritora poblana de fantasía, horror y ciencia ficción. Cuenta con dos libros publicados, una novela de alta fantasía: “Travesía Profética”, (2021), ed. Lapicero Rojo y el volumen de cuentos: “El pórtico de Dignirth”, (2022), ed. Akera. En 2020 fue una de las ganadoras del concurso: “Memorias. La generación de la pandemia”, del Instituto Municipal de la Juventud de Puebla, con el texto: “Evocación poblana”. En 2017 publicó el artículo: “Desafíos e innovación en los negocios de México y el mundo, en el libro Desafíos en el mundo empresarial y las ciencias de Montiel y Soriano, editorial BUAP, 2017.